Niños y niñas de Santa María disfrutaron de “Tito y la ruta del agua”: teatro, aprendizaje y conciencia ambiental

Con risas, música y un mensaje inspirador sobre el valor del agua, más de 150 estudiantes de prekínder, kínder, primero y segundo básico de la comuna de Santa María disfrutaron de la obra infantil “Tito y la ruta del agua”, impulsada por Codelco Andina y la Junta de Vigilancia de la Primera Sección del Río Aconcagua, en el marco de la campaña #CuidemosAconcagua, que busca educar sobre el cuidado del agua y del valle.

El encuentro se realizó en el Teatro Municipal de Santa María, un espacio lleno de color y alegría que permitió que los más pequeños vivieran una experiencia única, donde el arte, el juego y el aprendizaje se unieron para transmitir un mensaje de respeto por la naturaleza.
Desde la organización, se agradeció especialmente a la Municipalidad de Santa María por abrir las puertas de este hermoso espacio cultural y permitir que los niños y niñas disfrutaran de una jornada educativa y llena de magia.

En total se realizaron dos funciones, en las que participaron estudiantes de las siguientes comunidades educativas:

  • Escuela Guillermo Bañados
  • Liceo Darío Salas
  • Escuela Santa Filomena

La historia, protagonizada por Tito, un curioso zorrito culpeo, y su amigo Truchín, una simpática trucha arcoíris, invita a recorrer distintos paisajes del valle para descubrir cómo el agua da vida a todo lo que nos rodea. La obra enseña que el agua forma parte de un sistema integral que debemos cuidar, desde la cordillera hasta el mar.

Durante la presentación, los niños y niñas cantaron, bailaron y participaron activamente, llenando el teatro de entusiasmo y alegría. Profesores y organizadores valoraron la oportunidad de ofrecer una actividad que une entretenimiento, arte y conciencia ambiental, destacando cómo el teatro se convierte en una poderosa herramienta para aprender cuidando y disfrutar aprendiendo.

El cierre estuvo marcado por la aparición de una simpática gotita de agua, que bailó con los niños, se tomó fotos con ellos y los hizo reír, reforzando el mensaje sobre la importancia de cuidar este recurso vital.
Como recuerdo, cada estudiante recibió un cuento ilustrado de la obra, para compartir en familia la historia de Tito y seguir difundiendo el mensaje de protección del agua y del entorno.